Esta costumbre que tengo de traer tu recuerdo, me asfixia
como si colocara mi cabeza en una bolsa, es desesperante traer de vuelta esos
momentos que me dejan en la incertidumbre de si debo buscarte, o de una vez por
todas aceptar que nunca podre estar contigo, recuerdo esos versos de amor que
me decías mientras me asegurabas que estarías conmigo en salud y enfermedad,
que me serias fiel por el resto de nuestros días, con tan solo una mirada y
ahora, solo me acompaña la soledad y junto a ella veo por la ventana, el recuerdo de tu amor como las gotas de
lluvia que se deslizan por la misma, y esta distancia que me hunde en la
penumbra de tus brazos me hacen desear tenerte a centímetros solo espero ser
fuerte y así, algún día solo ser lo
suficientemente madura como para si te vuelvo a ver, mirarte a los ojos y
decirte: ¡Ya te he superado!
No hay comentarios:
Publicar un comentario